Melissa León Bustamante
Coach educativa y de TDAH
Educadora de Disciplina Positiva en la familia
Mindfulness Yomu Coach

A lo largo de estos años, en mi rol de maestra y coach educativa y de TDAH, he identificado que una de las principales preocupaciones de los padres de familia es cómo lograr que sus hijos sean más autónomos y responsables. En ocasiones, el esfuerzo por conseguir autonomía en sus hijos con TDAH, hace que frecuentemente se encuentren mandando, diciendo qué hacer o dando órdenes. Este actuar de los padres trae como consecuencia que sus hijos respondan con rebeldía y no cumplan aquello que se les está ordenando. Otros niños y adolescentes diagnosticados con TDAH pueden llegar a sentir que no están logrando los objetivos y las expectativas de sus padres y que los están decepcionando. Este sentimiento repercute negativamente en su autoestima. Por otro lado, los padres se sienten frustrados, estresados y desalentados al ver que sus hijos no les hacen caso y no los respetan.

Por lo mencionado, es importante que los padres de familia cuenten con herramientas de crianza como parte fundamental en el tratamiento del TDAH, ya que la forma como eduquen a sus hijos va a ser un pilar fundamental en el éxito del tratamiento y en su autoestima. En este artículo comparto una herramienta eficaz y fácil de usar de la Disciplina Positiva para fomentar la autonomía y, por ende, ayudar en la construcción de la autoestima. 

La tabla de rutinas tiene como objetivo que los niños y adolescentes pongan en práctica ellos mismos cada actividad o tarea, sin necesidad de que el adulto tenga que dar órdenes. También ayudará a sus hijos a sentirse más capaces, seguros y motivados. Es importante que sus hijos se involucren en la creación de esta tabla y que no sientan que es una lista de órdenes dadas por el adulto. 

Lo primero será que, ellos mismos, hagan una lluvia de ideas de todas las tareas que necesitan hacer en un momento del día determinado, como por ejemplo, al levantarse, al regresar del colegio o al acostarse. Cada familia escogerá aquel momento del día que sea más retador. 

Luego, se ordenan las tareas en orden cronológico y se construye la tabla. En este paso es necesaria la participación activa de los hijos, ya que es útil para interiorizar las tareas de la tabla. Además, cada familia puede usar su creatividad en la construcción de la tabla. Por ejemplo, pueden colocar fotos del niño haciendo cada una de las tareas, hacer dibujos o escribir las acciones en tarjetas. Las fotos y los dibujos brindan información visual necesaria para los niños y adolescentes con TDAH y los ayuda a hacer transiciones con mayor facilidad. 

Cuando la tabla esté lista, deben escoger juntos un lugar visible donde colocarla, para que ellos mismos puedan ver lo que sigue y si lo están cumpliendo. Es necesario dejar que ellos solos se guíen de la tabla en vez de ordenarles lo que deben hacer. Si en alguna ocasión el niño u adolescente olvida lo que debe hacer, el adulto cuidador puede simplemente señalar la tabla o preguntar con amabilidad: ¿Qué sigue en tu tabla de rutinas? y esperar en silencio la respuesta, sin dar órdenes o sermones.

Cuando los niños y adolescentes cumplan cada tarea de manera autónoma, se sentirán capaces y seguros, lo cual ayudará en su autoestima. Además, se sentirán motivados a cumplir sus responsabilidades. 

Los animo a diseñar su propia tabla de rutinas con sus hijos, ya que estoy segura que los ayudará a sentirse más felices en su rol de padres y, lo más importante, estarán regalándole a sus hijos habilidades que los acompañarán toda la vida.


Bibliografía
Jane Nelsen, J. (2002). Disciplina positiva. CULTRIX.
Nelsen, J., Foster, S. y Raphael, A. (2019). Disciplina positiva para niños con necesidades especiales. MEDICI.